lunes, 23 de abril de 2012

#runningtime Versión 42195 Heart&Soul



Objetivo, meta, estrategia, táctica…
No es tanta coincidencia que los conceptos principales de muchas personas se encuentren en sus actividades cot
idianas… y es que, para un servidor, el marketing, la publicidad y el running, de un modo u otro, forman parte de mi vida , y sin duda alguna, todo tiene conexiones (Recordad amigos, que soy un convencido causalista, y, no menos empirista, ¡toma ya!)

Creo que quedan bastante claros estos conceptos, y prueba de ello es la parte estratégica: “delinear” todo un plan para llegar hasta donde siempre hemos deseado: objetivo, metas...
Como leía a otro gran compañero de batallas, entrenar y mantener la compostura es la base de todo, los cimientos de un buen trabajo, por mucho frío, lluvia, nieve, nocturnidad, viento, coches, animales, vallas, sueño, trabajos, llamadas, semáforos, muros… hay que seguir "¡PA´LANTE!"

Y es que correr (Cambie correr por lo que a usted le motive, querido amigo) es eso, aprender a dirigirnos allá donde nuestra vista quiera mirar, aprender a sufrir (Que no está mal, en estos tiempos que, valga la redundancia, corren…), y disfrutar de cada kilómetro, cada minuto, cada cuesta y cada recta, sabiendo que nuestra meta nos espera. Creo que es un gran PORQUÉ válido para responder a todos los que nos preguntan asombrados ¿Por qué?

Retos sin los cuales, si estuviese en mi mano, no realizaría ni una sola actividad en esta vida: Para sentirte realizado, todo lo que hagas ha de tener un fin. (Son miles los actos que a diario se llevan a cabo sin ton ni son, porque lo marcan tendencias, tradiciones, lo manda el káiser o el virrey, o vete tú a saber…), en un seminario hace poco escuché (O quise entender, que soy muy de llevarme todo a mi terreno) que las personas trabajamos por conseguir un objetivo, y nos gusta conocer en qué acaban (Aunque montemos tornillos a un hierro, nos gusta ver el coche terminado: “Eso lo he hecho yo, lo hemos hecho nosotros”…) FINALIDAD, el running la tiene, no hay ni un solo entrenamiento en vano, y es uno de los muchos motivos por los que tanto me gusta.

"Heart and Soul"

Repetir el “modus operandi” habitual de cualquier carrera: Tras dejar todos los “aparejos” bien preparados la noche anterior, como siempre, madrugón, desayuno y al lío… Esta vez voy solo (Aún es pronto para "maratonear" con los amigos, pero seguro que pronto me cogen), metro desde La Latina hasta Alonso Martínez (Mi “disciplina” siempre desaparece bajo tierra, y me muevo por la “ley del mínimo transbordo”) que me deja tiempo para el ritual habitual: Vueltecita por salida, alguna cara conocida y conversaciones de ánimo con otros compañer@s, y cómo no, las "987502" pertinentes visitas a “la toilette” (Permitidme el “gabachismo” ante la cercanía a la Embajada francesa, por cierto, abarrotada por las elecciones, del que fue mi “cuartel general” pre-carrera). El que corre sabe de qué hablo…
Muchas voces extranjeras me recuerdan que el MAPOMA de toda la vida ahora es Rock ´n´ Roll Madrid Maratón y 10K, aparte es un maratón, y uno está acostumbrado a las medias nacionales.

De los primeros kilómetros, no tengo mucho que decir, me dediqué a frenarme (El ánimo te hace venirte arriba) e intentar no bajar de 4 minutos el kilómetro (Quién me iba a decir a mí el primer día que salí a correr, que habría un día en el que intentaría frenarme…). Momento de saludos a la altura del Santiago Bernabéu, donde "maratonianos" y "diezmileros" nos separamos, deseándonos mucha suerte para lo que nos queda.
Sin duda mi plan estaba funcionando, y tras recorrer medio Madrid me vi pasando sin mucho esfuerzo al globo de las 3 horas a la altura de Islas Filipinas (Lo que me llevó a replantearme si estaba haciendo las cosas bien, y sumar mil veces los tiempos, por si estaba forzando máquina sin darme cuenta…).

Fuencarral, Gran Vía, donde un compañero grita de la emoción al ver tanta gente (No tardémucho en unirme y chocar palmas unas cuantas veces con él) y la cinematográfica imagen del Carrión para nosotros solitos…"Abre los Ojos" llego a pensar, hasta que nos vemos en una de las inmensas pantallas de Callao... Y de repente, Medio Maratón en la Calle Ferraz 1:28:01 (Todo sobre ruedas).

Pintor Rosales, y primera duda: “¿Me duele el pie izquierdo?... Ni lo sé, parece que no…” (Ya viene “la del muro”) Parada “en Boxes” bajando hacia el Puente de los Franceses (Todo el mundo lo hacía, y tarde o temprano, con el "ser nervioso" que soy, me tocaba), y un nuevo amigo compartiendo arbusto:
- “Vamos bien, eh socio” Dice mi compañero
- “Sí, pero me da auténtico pánico la Casa de Campo” Respondo, poco psicólogo con mi compi, la verdad.
- “Bahhh, nos hacemos con ello, queda lo más bonito” Así se anima, ¡bien compañero!

Termino “mi faena”, miro el crono, y veo que no han pasado ni 15” desde que me decidí a parar, aunque tengo la sensación de haberme pasado una mañana entera con mi compañero de arbusto charlando… “Dale duro Boston, nos hacemos con ello” (Llevaba unas Adizero Boston, la “versión algo amortiguada” de las Adios, zapatillas homenaje a Gebrselassie, y que conozco porque las pretendí no hace mucho), lo que animó a mi compañero, que sonriendo por la gracieta zapatillil también se despidió de mí devolviéndome un “Vamos Mizuno”…

Casa de Campo, sorprendentemente sin incidencias, y KM 33. He pasado esto que llaman “el muro” (Tanto físico, como psicológico, que se produce aprox. en el km 30 y que se traduce en cansancio, pensamientos negativos…), y para mí ha sido “subir un bordillo” en Pintor Rosales… ni rastro (La alimentación y el entrenamiento, una vez más, claves), viva la constancia. Vuelta a la ciudad y miedos de nuevo (No recuerdo muy bien el recorrido: “¿Realmente hay que subir la Calle Segovia?”
Catacrocker, nahh ¡Aguachinimpo! (Y recuerdo por enésima vez un "cabeza, que de piernas vas sobrado" consejo de un gran amigo pocas horas antes de comenzar esta aventura...) Menos mal que giramos hacia Paseo Imperial… Es el barrio, o al menos donde duermo cada noche, y lo conozco muy bien, porque desde septiembre la mayoría de mis entrenamientos han partido desde aquí, así que: "UP UP UP, GO GO GO".


Tras los Pontones, presenciar un par de caídas (Que te hacen pensar en lo peor, y te recuerdan que somos frágiles), metro Pirámides y Paseo de las Acacias, donde escucho a un compañero con acento del sur: “Eso del fondo es Atocha” con sorpresa y emoción. Efectivamente, es Atocha, y marca prácticamente el kilómetro 40. Miro al crono en el 39, 2´45´´… y echo cuentas (3kmx4´ de media=12), me veo fuerte, sé que puede ser un error, es mi primer maratón y me podría permitir incluso ir andando si fallo en este “ataque” al reloj… pero qué cojones, vamos a bajar de 3 horas…(Disculpadme por expresarme tal y como pensé en ese momento). Y a partir de ahí, como una moto, crono a 3´ y pico, ritmo media maratón - 10.000. No puedo ir a menos…

¿Dónde vas Alfonso XII?

Parece gritar esta calle a todos (Escucho mil y un “esto es una cabronada” “esta cuesta habría que prohibirla”… y la inicio con miedo, pero al ver que paso gente (Y acordarme de las mil cuestas de Segovia, ciudad que “me enseñó” a correr, una gran escuela)… pues subo subo subo y me veo con el 41.
El 41 en el que se empieza a restar: 900 metros es el último cartel que pude ver antes de la meta, a la que esprinté con todo lo que me quedaba, llegando a rodar a 3´09´´el km, animalito de mí…

META

Mi primer MARATÓN: Veo un 2:58, Brazos arriba, lagrimón, abrazos y gritos con los compañeros de batalla. Euforia… Mucho trabajo para llegar hasta aquí… este era mi porqué, nuestro porqué.


En resumen, para mí el maratón ha sido como la mítica escena del piano de “Big” (Una de mis favoritas, de siempre…), y como Robert Loggia y Tom Hanks, he tratado con una disciplina que sé tocar desde hace tiempo, con asombro ante la magnitud de esta ocasión, mucho cuidado en cada paso, y el gran regalo de un final apoteósico…


Heart & Soul (Y mucha “Head”).




Muchas gracias a todos los que me habéis ayudado a llegar hasta aquí.

Enhorabuena a todos los "finishers", ¡GRANDES!

Y, Mr. Filípedes, quedamos en noviembre: NUEVA YORK

Clasificación

Garmin myConnect